sábado, 28 de marzo de 2020

BUSCANDO ALASKA SEMANA 8

BUSCANDO ALASKA

CIENTO TREINTA Y SEIS DÍAS ANTES

Una semana antes de que dejara mi familia, ellos habían decidido darme una fiesta de despedida, la cual ellos pensaron que asistirían mucha gente de mi antiguo colegio pero yo sabía que no iba a ser así ya que en mi antiguo colegio no tenía muchos amigos y quizás nunca me sentí mal por eso, y es que yo  "VOY EN BUSCA DE UN GRAN QUIZÁ" por eso es que decido irme al interno Culver Creek por eso decido irme a aquel interno en Florida, a la fiesta solo asistieron dos personas que fueron Will y Marie y solo hablaron de su evento sobre Dios, el cual para ser sincero no me intereso mucho y decidí quedarme hablando con mis padres, antes de irme en busca de una aventura y así iba hacer mis padre había asistido al mismo internado al cual yo decidí ir

CIENTO VEINTIOCHO DÍAS ANTES

El clima en florida era cálido y húmedo, demasiado caliente para el gusto de cualquier estudiante, por fin llegamos al internado y decidí llevar las cosas a mi cuarto con la ayuda de mis padres, el cual llegue a mi dormitorio sin aire acondicionado y solo cuatro paredes blancas, realmente no me imaginaba que fuera así, y así fue entres los tres llevamos todas mis cosas, mamá insistía con ayudarme pero yo solo le decía que así estaba bien, mamá y papá decidieron irse y nos despedimos de un gran abrazo, quizás ahora empezaba mi gran aventura y iba en busca de mi gran quizá y solo espero no haberme arrepentido de haber tomado está decisión después de haber organizado todo iba a conocer a mi compañero de cuarto del cual solo conocía su nombre Chip Martin y me causaba curiosidad el saber con quien iba a pasar mis días en ese internado y así fue cuando lo conocí un niño de 1.50 metros el cual se conocía todas las capitales del país y quizás yo solo me sabía las ultimas palabras de famosos antes de morir, Chip me había dicho que su apodo era coronel y quizás yo no tenía uno el cual decide ponerme gordo, después de haber dejado todas las cosas de el decidimos ir al cuarto de una amiga de él que en su puerta decía Alaska con tinta azul, y quizás era la niña más linda que había conocido y empieza hablar sobre su aventura en el verano, la cual cuenta como le tocaron una teta como si fuera un saxofón y se moría también por contarle la historia también a Takumi un niño de origen asiático que quizás también iba a conocer más adelante y me contaron todas las historias que sucedían en este internado y las reglas sobre fumar y tomar y que de pronto el águila nos podía ver y llevarnos a comité o una sanción y así fue como pase mi primer día en el internado, buscando mi gran quizá.

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